Recuerdos de mi viaje a Europa!

Me encanta viajar no solo por las experiencias, recuerdos y aprendizaje sino porque los viajes son la oportunidad de hacer sueños realidad, conocer personas y aprender de diferentes culturas. Que mejor que degustar diferentes comidas y tradiciones en la mesa de cada lugar que se visita.
Mi reciente viaje a Europa fue lleno de gratas sorpresas…
En Londres tuve la oportunidad de disfrutar una tarde de té en un lugar escondido dentro del sector de Soho en el “Soho Secret Tea Room”, para encontrar este lugar hay que saber que está ahí... Queda dentro de un bar en el segundo piso, para llegar hay que entrar por la barra del lugar y subir por unas pequeñas escaleras en forma de caracol, es un salón con decoración antigua que parece una sala de una casa, un té delicioso y una variedad de tortas maravillosas, perfecto para pasar una tarde tradicional tomando el té en Londres. Para la gente local esto es una comida y lo notaran porque es mejor que no almuercen mucho para poder disfrutar la cantidad de tortas y pasa bocas que sirven.

Budapest no solo tiene la tercera casa del parlamento más grande del mundo sino que es una ciudad llena de sabores, postres y especias en su comida. Si no tienen mucho tiempo y quieren ir a un lugar para probar de todo un poco  Les recomiendo que visiten “Tasting Table”, queda dentro de una bodega de vinos del palacio Keglevich construido en 1871. Este como otro edificios han sobrevivido guerras y revoluciones.

En Budapest es muy normal encontrar bares y restaurantes como en cuevas en el subterráneo. Este restaurante es en un wine cellar, con pocas mesas y atención personalizada de la mano de sus dueños, te dan a probar diferentes vinos de Hungría, quesos hechos en Hungría y carnes frías locales también.  El aceite de ajonjolí con el pan es delicioso, el chorizo de jabalí me encanto! no sabía que Hungría tenía vinos tan placenteros.

En la noche visite un restaurante tradicional de comida húngara “Rézkakas Bistro”. En Budapest por supuesto hay que probar el famoso “goulash”, carne de res con la salsa goulash y puré de papas con apio es delicioso. Nunca me había gustado tanto este plato hasta que lo probé en Budapest. Que delicia! confieso que solo en este viaje probé el famoso “Foie Gras” (producto alimenticio hecho del hígado del pato), en este restaurante preparan el pollo relleno de Foie Gras con champiñones y arroz con arvejas. La contextura es diferente a lo que estoy acostumbrada pero el sabor estaba rico. Lo que más me gusto fue un queso cremoso de cabra servido con carne fría, pan y vegetales! Para chuparse los dedos, por supuesto todo acompañado de un bien vino húngaro. La paprika se utiliza bastante, es normal ir al supermercado a comprar la bolsa de papitas de paprika para la manejada en el carro J
Nada mejor que terminar este viaje con un desayuno en el New York Café uno de los cafés más hermosos del mundo, el techo con diseños de mediados del siglo XIX, candelabros majestuosos colgando del techo, columnas hermosas; entrar a este lugar es como ir al pasado, el desayuno estilo bufete con un chefs que preparan omelets  con huevos reales - no la mezcla- y por supuesto champaña y uno de los mejores capuchinos que me he tomado. Este café es como estar dentro de un palacio en un cuento de hadas. Opulento y majestuoso.

En Viena fui a Klee, un restaurante que está a las afueras de la ciudad pero vale la pena visitar para Probar un poco de su comida tradicional, uno de sus platos cotidianos es el Wienerschnitzel la carne de ternera apanada a la perfección! La sopa de carne y pedacitos de pancake deliciosa, la carne cocinada con papas y zanahoria con un sabor casero maravilloso. Utilizan mucho la calabaza, la sopa de calabaza es la mejor que he probado y los raviolis preparados en casa con calabaza y crema de arándanos fabulosa.
Los postres son deliciosos! Imagínense un postre de remolacha con chocolate oscuro…Me encanto la comida tan fresca y deliciosa.

Estando en Viena uno de los mejores lugares para pasar una tarde con la mejor vista de la ciudad definitivamente es el bar en el último piso del hotel Sofitel. Lugar perfecto para un vino en el atardecer.

Como nota aparte, Me impresiono en Viena que para tomar el metro no hay seguridad ni nadie que pida el ticket, ellos confían que cada persona compra su boleto antes d abordar! Una ciudad majestuosa, musical y con una casa de la opera que hay que conocer! Para los amantes del chocolate, Austria es el lugar donde se van a enloquecer con la delicia.

Manejar desde Viena para Praga parando en el maravilloso Cesky Krumlov es un sueño, los paradores en la carretera con jugos naturales, comida fresca y una vista que te deja sin aliento. Cesky Krumlov es una pequeña ciudad ubicada en el sur de la República Checa, es Patrimonio Histórico de la Humanidad. Parece sacado de un cuento, con el castillo, el río, los puentes y las calles empedradas, muy romántico y un lugar de ensueño. Aquí tuve la oportunidad de comer pollo ahumado, torta de papa muy tradicional en la regional al igual que los “dumplings”, conejo asado y pheasant (faisán) que es un ave de carne muy fina. Sabe cómo el pollo! A este punto de mi viaje ya estaba preparada para probar de todo un poco!

En Praga son muy tradicionales los “dumplings” y las tortas de papas para acompañar las diferentes carnes que sirven; el pato es muy tradicional lo preparan con salas bbq y más especialidades al igual que el jabalí que también tuve la oportunidad de probar, pudiera decir que consumen más pato que pollo y más cerdo o jabalí que carne de res.
Si están en Praga y quieren visitar un restaurante de cadena que venda comida tradicional la opción sería Vkolkovne restaurant, es como un sports bar. Lo interesante acá es que dentro del restaurante la gente pude fumar así que toca sentarse en el sótano del lugar para tratar de respirar un aire más puro! La sopa de goulash la sirven con un pretzel encima, es muy rico para un almuerzo rápido mientras se está caminando por la ciudad. La sopa de vegetales la sirve dentro del pan muy apetitoso.

Mi destino próximo seria Múnich para el Oktoberfest, una experiencia que definitivamente creo que hay que vivir una vez en la vida. Dura tres semanas, la primera semana se conoce porque van más turistas de todo el mundo, la segunda más italianos y europeos y la última es más de la gente local. Es una feria con juegos, parque de diversiones y dentro del parque hay diferentes bodegas que son los "tents" donde está la fiesta. Depende de la hora que se llegue se pueden encontrar filas. Para que te sirvan cerveza hay que tener una mesa que obviamente cuando organizas el viaje con poco tiempo es difícil de conseguir. Son unos lugares enormes con una tarima en la mitad y la banda de música tocando desde la a mañana hasta la noche música tradicional. Es divertido ver los meseros con hasta 10 vasos de un litro de cerveza para servir, los pretzel y las salchichas pasando por las mesas, todas las personas paradas en las sillas bailando y cantando esa una energía fuera de serie.
Me encanto ver personas de todas las edades y todos con sus vestidos tradicionales, las mujeres con su vestido dirndl tradicional de la región de Bavaria y los hombres con bundhosen o lederhosen cuando es de cuero. Afortunadamente pudimos hacer unos amigos que nos acogieron en su mesa para poder pedir el litro de cerveza, bailar y tratar de cantar o al menos decir "prost" salud!
Múnich tiene una gran influencia de la cocina del norte de Italia, por eso es tan normal encontrar una gran cantidad de restaurantes italianos con cócteles italianos y deliciosos!
Por supuesto las salchichas de diferentes tamaños, colores y sabores no dejan de estar a la orden del día y más cuando uno se toma un litro de cerveza en Oktoberfest.
Mi último destino antes de regresar a Viena y tomar mi vuelo a Miami fue la hermosa ciudad de Salzburgo en Austria, lugar donde nació Mozart.
Manejar de Múnich a Viena fue lo mejor de todo este viaje, la mejor vista, era como estar dentro de una película, el placer de ver un montón de pueblitos hermosos, los diferentes verdes de sus colinas era un regalo indescriptible de la vida además con la luna llena de fondo en el atardecer!
Salzburgo esta justo después de cruzar la frontera de Alemania y Austria, una ciudad hermosa, con un castillo magnifico y por supuesto restaurantes maravillosos!
“Carpe Diem”, es un restaurante especializado en tapas o "finger food" la comida la sirven de manera creativa, otros platos los sirven en unos conos sazonados y crocantes. Y todo es para compartir en la mesa.
Imaginen una carne de hamburguesa con queso cheddar servido dentro de un cono de romero con papitas fritas al lado y salsa de tomate hecha en casa! O un curry con “couscous” y vegetales.

Un jamón español con tomate, aceitunas, y espuma de queso parmesano, un ravioli de cebolla roja con queso scamorza, calabaza y vegetales. Una combinación atrevida pero riquísima.
Salzburgo me encanto para regresar un día, salir de un restaurante como este para ir a una calle donde están todos los bares y discotecas; caminar de bar en bar con la gente local y turistas fue maravilloso, lo único incómodo para mi es que fuman dentro de cada lugar. Un viaje maravilloso, lleno de recuerdos y una gran experiencia culinaria.